lunes, 21 de septiembre de 2009

50+1

Eso me va a pasar mañana, tendré 50 años + 1. Eso me da qué pensar. Si me pusiera a pensar tengo muchas más de 50+1 razones para dar gracias a Dios. No tendría ni 50+1 años para hacerlo, simplemente no tendría suficiente tiempo. Como mañana probablemente no tendré tiempo para hacerlo, aprovecho este momento que tengo para escribir. Quisiera empezar diciendo que lo primero que se me ocurre es dar gracias por todos estos años. Con buenos y malos momentos, con alegrías y tristezas, sola o acompañada, no me gustaría dejar de dar gracias por todo lo vivido hasta ahora. Sería totalmente injusto no hacerlo. La vida es en sí el mejor regalo que nos han hecho. Hay dos cosas que son lo mejor que me ha pasado: ser madre (lo más de lo más) y mi vuelta a la casa del Padre hace 15 años. Las dos cosas han llenado totalmente mi vida. Para ser más precisa, las dos cosas son mi vida y en las dos me realizo plenamente como persona. De ninguna de las dos podría renegar, son parte esencial de mí. No hay mayor tesoro que ser madre. Y qué decir de ser hija del Padre, no hay nada comparable en este mundo. La certeza de Dios en nuestra vida, de Jesucristo como amigo, redentor y salvador es algo que sobrepasa cualquier cosa que podamos vivir o imaginar. Todo eso lo he vivido yo, lo vivo y lo viviré y por pura gracia no morirá conmigo porque es mi pasaporte a la eternidad. ¡Qué joven soy! Sólo han pasado 50+1 años de vida eterna.

viernes, 4 de septiembre de 2009

La "rentrée"



Ha sido un buen verano. Como todo lo bueno ha pasado deprisa. Ahora estoy en plena "vuelta al cole", "rentrée" que dicen los franceses. Primero estuve en la zona de Sanabria (Zamora) en casa de mi amiga María. Es una zona preciosa con muchos árboles y hasta un lago de origen glaciar que te hace pensar que estás en Suiza o el Norte de Italia. Fueron días llenos de tranquilidad, buenos alimentos (del huerto) y mucha amistad. María tiene una casa preciosa, grande y acogedora, que refleja perfectamente como es ella. De allí el día 20 me fui para Sanxenxo (Pontevedra) a disfrutar de mi amiga Pepa y su familia. Fueron días llenos de ¡¡¡MAR!!! Me encanta el mar, me encanta Galicia y me encanta Pepa. La verdad es que me siento muy afortunada por tener tanta gente amiga y generosa a mi alrededor. Es parte de la maravilla de la comunidad. El día 24 Pepa y yo nos fuimos para Santiago a disfrutar de una semana de oración con nuestro grupo, Maranatha. ¡Qué pasada! ¡Qué gozada! No éramos muchos, estábamos los que el Señor ha querido reunir, ni uno más ni uno menos. Mamen y Vicente Borragán han conseguido un "combinado" estupendo, mezclando en la coctelera del Señor todos los ingredientes necesarios: Jesús, alabanza, adoración, enseñanza, fraternidad, hermandad, compartir y mucho amor, a todo ello agregar albariño, pulpo, pimientos de Padrón, mejillones, queso, navajas, berberechos y demás productos gallegos, y tenemos el cóctel perfecto para finalizar el verano. Uno vuelve al tiempo ordinario con la batería bien recargada y dando muchas gracias por todo lo vivido. Ahora al cole a trabajar mucho. Este año tengo jornada completa y un montón de clases. Es un reto, pero como siempre me pongo en manos del único que lo puede todo, y le pido que desde este momento nos bendiga a todos en todo lo que vayamos a hacer. Espero que todos tengáis una buena "rentrée".