sábado, 31 de diciembre de 2011

Feliz 2012

Le pido al Señor que nos conceda alegría para llenar nuestros días, paz para llenar nuestros corazones y amor para llenar nuestras vidas.
"Toda dádiva buena y todo don perfecto viene de lo alto", Santiago 1, 17
Que el dador de todo lo bueno y perfecto nos bendiga con las bendiciones del cielo en este año.

¡FELIZ Y BENDITO AÑO NUEVO!



viernes, 30 de diciembre de 2011

Año viejo

Llega el momento de hacer memoria del año que ha pasado. 12 meses cargados de cosas buenas, malas y regulares, pero sin duda llenos de vida. Se amontonan paisajes, personas, viajes, vivencias y cuando menos te lo esperas, ha vuelto a pasar todo un año. De mucho de ello ya he escrito en este cuaderno de bitácora (palabra que me encanta) y otras se han quedado para siempre en el cajón de mi memoria. Como toda historia que se precie de serlo, lo mejor es empezar por el principio. Pues vamos allá, y volvamos a enero de este año que se acaba. Como siempre desde hace unos años todo empezó en compañía de Pilar y Mariángeles, en casa de la primera. El día 1 de enero suele ser un día "raro". Te levantas tarde y la verdad que algo resacosa de la noche anterior. Mi hija cumplió ¡28 años! el día 4 y le doy muchísimas gracias a Dios por ello. Ella es sin duda lo mejor que tengo. Los Travellers celebramos nuestro Primer Festejo Postnavideño o "Fiesta del Cascajo". Nos reunimos en casa de Gonzalo el día 8 de enero y allí disfrutamos de una velada ruidosa y jaranera. Tan bien nos lo pasamos que ya estamos preparando el Segundo Festejo. Todo vale como excusa para reunirnos y disfrutar unos de otros. Entre los días 12 al 15 estuve en El Escorial en el Encuentro Preparatorio de la JMJ. Matteo Calisi, Presidente de la Fraternidad Católica, me pidió que fuera en su lugar. Fue muy interesante ver todo lo que se estaba preparando y compartir con gente de todo el mundo. Teníamos que esperar hasta agosto para ver todos esos planes plasmados en la vida real, y la verdad es que te entraban muchas ganas de que sucediera todo ya mismo. Aunque tenía planes para irme a Italia en la segunda quincena de enero, todo se trastocó por la repentina hospitalización de mi padre. Gracias a Dios todo se quedó en un susto y al día de hoy mi padre está bastante bien. Me quedé en Madrid y aproveché para disfrutar más de mi familia. Y llegó febrero. El día 4 de madrugada murió Fidel y nos dejó un vacío enorme. Mi madre celebró el día 18 su cumpleaños, ¡83 años! Como cada año desde hace 8, nos reunimos los de Pozuelo en Pozuelo. Fue un encuentro difícil, pero bastante provechoso. Lo mejor de estos encuentros es volver a ver a hermanos de toda España, a los que no tienes la oportunidad de ver con frecuencia. A finales de febrero tuve que ir a Rumanía a traducir en un Encuentro de Jóvenes de la Renovación de Europa. Fui con Bárbara y con Ruth, y la verdad es que nos lo pasamos muy bien. El primer fin de semana de marzo me fui para Loyola con Margot a la Regional de la zona Norte. ¡Una gozada! Predicaba Manolo Tercero y, como siempre, no tuvo desperdicio. De Madrid también fueron Encarna y Mamen. El día 17 me fui para Sacrofano, cerca de Roma, al Coloquio sobre el Bautismo en el Espíritu que organizaba el ICCRS con el Pontificio Consejo para los Laicos. Margot y yo fuimos como siempre juntas a traducir. De España fueron Chus Villarroel y Clara como representantes. Fue muy interesante. Yo me quedé hasta el día 26 traduciendo para el Consejo del ICCRS. El mes de abril comenzó con un tiempo esplendoroso. Aproveché para pasear un montón por las Dehesas de Villalba Este año la Semana Santa cayó muy tarde, casi a finales de abril. Me quedé en mi Parroquia y disfruté cantando con mi coro. El domingo de Pascua, 24 de abril, me fui para Roma. Allí estuve hasta el día 21 de mayo, que volví a Madrid. Pude disfrutar de Julia, mi querida Julia, a tope. De todo ello ya me he explayado a gusto en varias entradas y si os interesa refrescar la memoria, no tenéis más que ver las entradas de abril y mayo. A mi vuelta a Madrid, ya casi con mayo terminado, disfruté de algunos paseos estupendo por mi ciudad. Sobre todo recuerdo uno con Marga y Encarna por Madrid Río, un espléndido parque que bordea el Río Manzanares. Merece la pena pasearlo y disfrutar de unas espléndidas vistas. Llegó junio y el día 12 mi padre celebró su cumpleaños, ¡83 años!. Yo no pude estar ese día con él porque estaba en Italia. Fuimos a celebrar Pentecostés en Asís. Esta vez no me acompañó Margot a traducir. En su lugar tuve a Vicky, la gallega, como compañera de cabina. Fuimos muchos desde España, y disfrutamos un montón. Volví a Madrid por poco tiempo. Tuve que volver a Roma a traducir en Adoratio 2011. No era un encuentro de la Reno, era una cosa bastante más "pomposa". De todos modos, a pesar de lo tedioso de algunas de las intervenciones, pude disfrutar de nuevo de la compañía de Vicky y como siempre disfruté a tope conociendo a nuevas personas de otros lugares del mundo. Empezó el verano con todo su esplendor, sus días largos y su canto de grillos. Los últimos días de junio y los primeros de julio los pasé con Marga en Orihuela Costa. Días de playa y relax. No tenía planes para viajar en verano, de modo que a mi vuelta de la playa pasé el resto del mes de julio tranquilamente en mi casa, disfrutando a tope de la piscina. A finales de julio tuvimos el Rastrillo de la Parroquia. Llegó agosto y todo "respiraba" JMJ. El día 13 estuvimos algunos Travellers de excursión en El Paular. Y por fin, llegó la ansiada visita del Papa. De todo lo que disfruté en esos días especiales también me he explayado a gusto, y repito si queréis refrescar la memoria no tenéis más que leer la entrada de agosto. Fue maravilloso ver en vivo y en directo todo lo que nos habían contado en enero en El Escorial. Tenía planeado irme a Roma en septiembre, pero mis planes cambiaron. A principios de septiembre decidí hacer un viaje en solitario. Me fui para Francia, vi a Fernando en San Juan de Luz, visité Lourdes, estuve en Lasarte con hermanos de la Reno de Guipúzcoa, fui a Loyola, visité Getaria y a mi vuelta paré en Burgos. (Ver entrada de semptiembre). El día 22, como siempre, fue mi cumpleaños. ¡53! Lo celebré con mis amigos el día 24. Organicé una cena "de traje". Ya sabéis, "y traje esto, y traje lo otro". Lo pasamos muy bien. En octubre, el día 6, me fui para Paray-le-Monial con Margot, a traducir en el Primer Congreso Mundial del Corazón de Jesús, porque nuestra "fama" como traductoras ha traspasado ya las fronteras de la Reno. (Ver entrada de octubre). Los días 22 y 23 celebramos el Encuentro Nacional en el Colegio del Recuerdo. Esta vez no tenía que traducir porque predicaba Chus. El lema de este año fue "Yo hago nuevas todas las cosas". Y llegó noviembre, y todavía hacía calor. La verdad es que ha sido un otoño seco y bastante caluroso. El día 17 me fui a traducir a Alemania con Mamen y María Jesús. Casi no voy porque tuvieron que ingresar a Cecilia, mi hija, pero gracias a Dios se recuperó bien y pude irme. El día 26 llegaron Sor Sophie y Laurent, de ACAY, para presentar su misión en Madrid. Y pasó noviembre y llegó el "festivo" diciembre. Estuve con Encarna en Puente la Reina, pasando el puente de la Inmaculada. A la vuelta comencé a preparar mi casa para la Navidad y mandé las tradicionales tarjetas navideñas, por correo tradicional (snail mail como dicen los ingleses) y por correo electrónico. La Nochebuena la pasé en casa de mis padres con mi hermana Ana y mi hija, Cecilia. El día de Navidad nos reunimos toda la familia a comer, en total 18, en casa de Ana. El día 27 me vine para Alpedrete a mi casa. Ayer, 29, estuve ensayando con mi coro el concierto de Villancicos, y hoy, 30, iré por la tarde a cantar en el concierto.
Este año no he viajado mucho con los Travellers, porque la verdad es que hemos estado algo vaguillos con los viajes. Enki Tours preparó un viaje a Alemania en octubre, pero yo no pude ir. Desde julio estoy traduciendo para el Encuentro Mundial de Jóvenes de la Renovación que se celebrará en julio del 2012. (No confundir con la JMJ de Río que será en el 2013). Si Dios quiere me iré a Brasil el próximo verano, y la verdad es que me apetece. Pero eso será el año que viene. He traducido mucho, he volado bastante (en total he aterrizado y despegado 14 veces), he engordado, me he cortado el pelo (adiós a la melena rubia), no he dejado de fumar (aunque lo sigo intentando), he predicado en varios grupos, he leído mucho, he visto bastantes películas (sobre todo por internet), he cantado, he bailado, he alabado, y sobre todo he podido disfrutar ¡¡¡mucho!!! con muchos de vosotros. En fin, que no puedo dejar de dar gracias al Señor por todo ello, a tiempo y a destiempo, por lo bueno y por lo malo, por lo que pudo ser, por lo que no pudo ser. Y ahora, a por el año nuevo.

lunes, 26 de diciembre de 2011

Boxing Day


Boxing Day o Día de las Cajas es una festividad celebrada principalmente en las islas Británicas y otras naciones que pertenecieron al Imperio británico. Se suele realizar el 26 de diciembre y durante la fecha se promueve la realización de donaciones y regalos a las clases más empobrecidas de la sociedad. Boxing Day puede ser traducido como "día de las cajas", y su nombre está relacionado con el origen de la festividad.

Erróneamente se ha asociado el término Boxing Day a la necesidad que tienen las personas de deshacerse de los envoltorios de los regalos de Navidad el día siguiente. El origen se remonta a la Edad Media. Se ha sugerido que después de la Navidad, las clases nobles entregaban cajas con comida y frutas a su servidumbre. También se ha propuesto que este día los sacerdotes sacaban a la vista cajas con donaciones de caridad hechas previamente. Otra teoría indica que el 26 de diciembre, los empleados y aprendices se dirigían a sus puestos de trabajo con una caja, donde el empleador depositaba dinero, al final del día, los primeros se dividían el dinero, lo que constituía una especie de aguinaldo.

Boxing Day coincide con la festividad católica de San Esteban, aunque en algunas naciones la festividad es desplazada hacia el próximo día hábil en caso de que el 26 de diciembre sea sábado o domingo.

Este día suele ser utilizado tradicionalmente para la realización de competiciones deportivas como partidos de rugby, fútbol, cacería, etc.

Hasta aquí lo que la Wikipedia cuenta sobre este llamado "día de las cajas", 26 de diciembre. Aquí en Madrid no es fiesta, pero en Cataluña y creo que otras regiones de España sí que lo es. Hay una canción de Serrat que me encanta, "De cartón piedra", que yo cantaba de joven. En ella hay una frase que dice: "que de San Esteban a Navidades, entre saldos y novedades..." Pasaron años hasta que me dí cuenta de que se refería a un año completo donde se iban sucediendo las distintas estaciones del año, con esa maniquí luciendo distintos modelitos. Por esa época yo no tenía ni idea cuando era San Esteban, ni siquiera quién era ese Santo. Ahora, gracias a Dios, tengo algo más de cultura "católica" y puedo ubicar el Santo y el día.

"La Nochebuena se viene, la Nochebuena se va", cantamos en un villancico tradicional, y eso es lo que ha pasado como todos los años. Parece que nunca va a llegar, y al final pasa a toda velocidad, como casi todo lo bueno. Ya queda atrás esta Navidad del 2011 y comenzamos a preparar las fiestas de despedida del año que se va, y recibimiento del año que empieza. Es difícil mantenerse ajeno a todo ello, porque nos bombardean por todas partes con resúmenes del año, con pronósticos del que viene, y con un sinfín de ideas de cómo celebrarlo. Debo reconocer que me produce algo de hastío este hartazgo de "vamos a divertirnos por decreto ley". Nochevieja nunca ha sido una de mis fiestas favoritas, ya que cuanto más me esforzaba por pasarlo bien solía pasarlo peor, y eso me ha dejado un regusto agridulce con respecto a la misma. Desde el 2006 la celebro con amigas en casa de Pilar Camacho. Solemos cocinar cada una alguna "delicatessen" y cada año se van añadiendo lo que hemos venido en llamar "corazones solitarios". Solitarios que no tristes, que conste. En la cena solemos ser sólo chicas, y luego después de las uvas se nos unen otras personas, por lo general parejas. La verdad es que lo solemos pasar bien y se está volviendo una agradable tradición. Suele pasar que las cosas más sencillas, las más pequeñas, son las que proporcionan mayor alegría. Por eso no deberíamos planear grandes cosas, creo que son más importantes las personas con las que celebrar. Lo bueno es que, en mi caso, esas personas suelen ser no sólo amigas, sino también compañeras de viaje en la fe, y eso las hace realmente especiales. Os aseguro que el modo de celebrar es completamente distinto. Por eso le doy muchas gracias al Señor por haberlas puesto en mi camino.


viernes, 23 de diciembre de 2011

Vísperas navideñas


Ayer cumplimos con el tradicional rito de la Lotería de Navidad. Las vocecillas de los niños de San Ildefonso son como el pistoletazo de salida de la Navidad en España. Hoy, también según la tradición, es el día de la salud. Ya que no nos ha tocado el gordo, al menos tenemos salud. Y es que ya se sabe que el que no se conforma o contenta, es porque no quiere. Otros esperarán ansiosos a la Lotería del Niño, para seguir soñando. Pero, mientras tanto, aquí estamos con los últimos preparativos de la cena de Nochebuena, de la comida de Navidad, etc... Algunos andarán enloquecidos buscando esos juguetes ya hace tiempo agotados y que pueblan los sueños de tantos niños. Los habrá que se gasten mucho más de lo que tienen, para intentar paliar estos tiempos tan negros que nos han tocado vivir. Y lo más triste es que cuando llegue enero estarán mucho más endeudados y probablemente no hayan conseguido comprar ni un poquito de felicidad y bienestar. Pero, todos los años ocurre el mismo ritual. Luces, prisas, sonrisas forzadas, deseos de paz, amor, felicidad, consumo desenfrenado. La Navidad se queda en muchos casos sólo en eso. Y te paras, y miras, y te preguntas, ¿qué estamos celebrando? Y lo más triste es que muchos no pueden contestar a ciencia cierta qué es lo que celebramos. Y además, ¿por qué lo celebramos así? Es decir, ¿es necesario tanto gasto y tanto fasto? Sinceramente yo creo que no. La Navidad no se puede quedar en la magia barata de un momento, tiene que ser mucho más. A veces tantas luminarias nos impiden ver la esencia de lo que realmente es. Y es que cegados por el brillo de tantas cosas, a menudo banales, no dejamos que nos alcance la luz del único que debe alumbrarnos. "Por la entrañable misericordia de nuestro Dios, nos visitará el sol que nace de lo alto. Luz para alumbrar a las naciones". Yo, personalmente, en medio de mi oscuridad, de mis jaleos, de mis ruidos, deseo que esa Luz llegue. Que ilumine hasta el último rincón de mi vida, y de la de las personas que me rodean, los próximos y los más lejanos. Le pido al Señor que nazca en cada palabra no pronunciada, en cada silla vacía, en cada casa a oscuras. Que llene con Su presencia todo.

martes, 13 de diciembre de 2011

Otra vez de puente en Puente

Ya en el 2007 escribí sobre estar "de puente en Puente" y ahora he vuelto 4 años después. Es la tercera vez que voy en estas fechas a Puente la Reina y siempre me deslumbra lo bonito que es. Como dicen que hay que tener amigos de todas partes (según el dicho "hasta en el infierno"), tengo mucha suerte de contar con una amiga, Encarna, de esta hermosa tierra navarrica.
Salimos el jueves 8, junto con Vicente Borragán, hacia Caleruega. Encarna nunca había estado allí y aprovechando el viaje hacia Navarra, paramos para disfrutar de la patria chica de Santo Domingo. Tuvimos mucha suerte porque el día era soleado y hasta calentito. En Caleruega visitamos la Iglesia de San Sebastián, donde el Párroco estaba preparando la Misa de la Inmaculada y Vicente pudo charlar animadamente con él. Después estuvimos en la casa de los dominicos, donde visitamos el museo donde se exponen esculturas del Padre Salas. Sobre todo nos impactó una de ellas sobre la Última Cena. Luego bajamos a la bodega de Juana de Aza, madre de Santo Domingo. Aunque es Beata, en Caleruega siempre la han llamado Santa Juana de Aza. De allí fuimos a la Iglesia de Santo Domingo donde nos encontramos con el Padre Salas, el de las esculturas, que estaba haciendo fotos en el coro. Quisimos bajar a ver el pozo pero estaba cerrado. Tuvimos la suerte de encontrarnos con una de las hermanas dominicas, que gentilmente nos dejó la llave para entrar. ¡Suerte de ir con Vicente Borragán! Me encantó cómo le dijo: "Padre, le tengo muy oído en cintas". ¡Benditas grabaciones! Luego fuimos a lo que llaman Museo, que es el claustro del convento de las dominicas, y nos volvieron a dejar la llave para entrar. Vicente estaba encantado. La verdad es que está cuidadísimo y da gusto verlo. Desde Caleruega nos dirigimos hacia Silos, pero no pudimos ver el claustro románico porque en festivos sólo lo abren por la tarde. ¡Otra vez será! Nuestro destino para comer era Lerma, donde nos reunimos con otros hermanos de Maranatha y Chus Villarroel. Por la tarde entraba de novicia en las dominicas de Lerma una chica que conocían y Chus presidía la ceremonia. Encarna y yo teníamos la intención de quedarnos pero la Iglesia estaba hasta la bandera y no se veía nada. Ante la perspectiva de pasar varias horas de pie decidimos seguir hacia Puente. Vicente se quedó y volvió a Madrid con otros dominicos. Llegamos bien a Puente, aunque hubo un momento de una niebla muy densa en el que se veía bastante poco. Gracias a Dios no duró mucho. La hermana de Encarna nos había preparado un conejo y unas verduritas con patatas para cenar. ¡Delicioso! Nos acostamos temprano después de ver un rato la tele. Lo mejor de estos viajecitos es que no tienes la obligación de hacer nada, simplemente dejarte llevar por lo que surja. Al día siguiente quedamos con Laura, la hermana de Encarna, y nos fuimos a caminar con ella. Es una andariega increíble. Ella sale todos los días y va a un pueblo que está al lado. En total camina 8 km diarios a buena marcha. El día amaneció con niebla pero poco a poco se fue despejando y las vistas eran increíbles. Al volver cogimos el coche para acercarnos al Señorío de Sarría. Es como de cuento de hadas, con castillo y todo. Encarna y Laura me hicieron un recorrido por lugares que recordaban de su infancia y adolescencia. Nos tomamos unas cañitas con Laura y nos fuimos a comer. Por la tarde habíamos quedado con Quintín en Estella. Estuvimos paseando y tomando unos vinitos. Volvimos a Puente a cenar y nos acostamos temprano. A la mañana siguiente estuvimos por Puente, era día de mercadillo, y estuvimos pululando por los puestos. Habíamos quedado con Quintín para ir a Pamplona. Allí estuvimos paseando, fuimos al Mercadillo de Navidad en la Plaza de toros, tomamos café en el famoso Café Iruña (¡precioso!) y luego fuimos por el Parque de la Taconera, subimos por la cuesta de Santo Domingo, Estafeta, etc... En resumen, recorrido de los famosos encierros. Luego ¡de pinchos! Es una ciudad muy viva y con unos bares muy bien surtidos de cosas deliciosas. Volvimos a Puente a tomar café con Laura en su casa. Luego estuvimos sesteando, Encarna en el sofá delante de la tele y yo en mi camita más a gusto que nada. La verdad es que he dormido muy bien estos días, cosa que no me sucedía desde hace tiempo. Por la noche habíamos quedado para ir al grupo de Puente y luego a cenar en La Casita, casa que tienen alquilada unos hermanos de Navarra donde tienen su comunidad. Habían estado todo el día de convivencia con los niños de los distintos grupos. Ese día habían estado unos 30 niños entre los 3 y los 5 años. La labor que hacen con niños y jóvenes es increíble. El grupo de oración es pequeñito, pero alaban con mucha fuerza. La cena fue deliciosa, preparada por Luci y sus pinches, Mari Cruz y Ana. Era la primera vez que visitaba La Casita, y debo confesar que me hizo mucha ilusión conocerla por fin. En una de las bajeras habían montado un Belén precioso, con figuras grandes, llenas de color. Esta gente trabaja muchísimo y tienen una entrega y un ímpetu increíbles. Entre platos deliciosos y agradable conversación se nos pasó el tiempo volando. Aunque nos acostamos tarde, nos levantamos temprano para salir cuanto antes para Madrid. El viaje de vuelta fue muy bueno, y llegué para comer con mis padres. Y luego para casa, donde llegué temprano por la tarde. Y aquí estoy escribiendo y preparándome para la Navidad. ¡Sólo quedan 12 días!
No puedo más que dar gracias al Señor por estos días tan llenos de cosas buenas y agradables. Sobre todo de gente buena y agradable. ¡Gracias, Enki, por hacerlo posible!