lunes, 22 de septiembre de 2008

¡¡¡50 años y olé!!!





























Algunas fotos de mi vida. No son maravillosas, pero me parecen preciosas por todos los recuerdos que me traen. Permitidme, este pequeño autohomenaje, este momento "egolou" total. Yo creo que la ocasión se lo merece. No todos los días se cumple medio siglo.




























Una de mis primeras fotos en brazos de mi madre.


















Pues sí. Hoy cumplo 50 años. La verdad, es que se siente como un pequeño sobresalto, como un vacío en el estómago cuando se piensa, pero esto es lo que hay: 50 estupendos y espléndidos años. Me está mal decirlo, pero me siento en plena forma. Espero que las goteras no empiecen a aparecer, y me tenga que arrepentir de decirlo así. Gracias a Dios, y nunca mejor dicho, de momento no me puedo quejar, ni quiero quejarme de nada. Han sido 50 años llenos de acontecimientos, sorpresas, momentos alegres y tristes, buenos, malos, peores, estupendos y todos los calificativos que os podáis imaginar. No he llegado a cumplir, todavía, todos mis sueños, pero no me puedo quejar de lo logrado hasta ahora. Como el ave Fénix, he resurgido de mis cenizas varias veces y he remontado el vuelo, llegando mucho más alto de lo que podía esperar o desear. La verdad es que nunca lo he tenido que hacer sola, el Señor siempre me ha puesto "angelillos" a mi alrededor que han contribuido en gran manera a hacerlo todo posible. Algunos de ellos leen todos estos rollos que pongo en mi blog, y por eso les quiero dar las gracias por todos los momentos estupendos que hemos compartido. Siempre me ha encantado mi cumpleaños. No necesito celebrarlo con grandes fiestas, ni nada de eso, simplemente es un día especial. Ya he tenido la suerte de empezar a celebrarlo el sábado, con mis compis de Música. Ayer, lo celebré con mi familia, y hoy lo he celebrado en el cole, con pastitas, dibujitos de mis niños (que me han cantado estupendamente el "Happy Birthday"). ¡Qué más se puede pedir! Vivir es una aventura tan increíble en sí misma, que no podemos permitirnos perder el tiempo pensando en lo que pudo ser y no llegó a ser, o en lo que se ha quedado atrás, o en lo que vendrá, o en "¿qué será, será?"... Disfrutemos el presente a tope, yo pienso seguir haciéndolo. Disfrutemos de esas pequeñas cosas que al mundo le parecen absurdas y que encierran lo más precioso, lo más rico, lo mejor de esta vida. Y sobre todo, demos gracias a Dios por poder compartirlo en comunidad. Por eso, me digo a mí misma ¡FELICIDADES, CAMPEONA!


martes, 2 de septiembre de 2008

Vuelta

¡Aquí estoy de nuevo! He estado vaga con esto del blog todo el verano. La verdad es que es muy bueno desconectar de vez en cuando. Pero, ya estoy de vuelta. Espero que todos hayáis pasado un verano genial. A algunos os he visto, a otros no, incluso creo que hay gente que lee esto y que ni siquiera conozco. Bueno a todos ¡feliz vuelta!
Ayer me incorporé al trabajo y volví a ver a todos mis compañeros del cole. Me encantó sentirme parte de un equipo, de un proyecto y porqué no decirlo de una ilusión. Lo que más me gusta es estar en un colegio católico, donde se reza antes de empezar y donde se habla de Jesucristo como de nuestro mejor amigo. Es un lenguaje que entiendo y que comparto. Da gusto pensar que en esta sociedad tan secularizada todavía quedan espacios donde Dios se hace cotidiano. En fin, espero mantener la ilusión. Este año no tengo jornada completa y espero saber aprovechar el tiempo libre. He pensado en dar clases particulares aquí en casa, para compensar un poco el sueldo. Hasta el día 11 no empiezan las clases y ahora estamos preparando las aulas, los horarios, el material y todas esas cosillas necesarias para empezar con buen pie.
Mi verano ha sido tranquilo. Estuve unos días en la Costa Brava y disfruté muchísimo. ¡Qué preciosidad! Luego aquí en casa, redecorando mi vida. He aprovechado para tirar cosas, para colgar lámparas, para cambiar muebles. Todavía me quedan cosas por arreglar pero me gusta mucho como está quedando mi casa. Hace un año esto era un caos, ahora empieza a ser mi espacio, y me gusta mucho. La última semana de agosto estuve en Santiago de Compostela con mi grupo de oración. Ha sido una semana distinta e intensa. Ahora con las pilas más recargadas estoy deseando que llegue el otoño. Todos los años me pasa lo mismo. Me harto del verano y me apetece meterme de lleno en la siguiente estación. Además en octubre tenemos el Encuentro Nacional de la Reno y luego me voy a Jacksonville (Florida) a traducir en un encuentro internacional. Antes de eso el día 22 de septiembre es mi cumpleaños. ¡Este año me caen los 50! ¡Qué barbaridad! Espero celebrarlo por todo lo alto, creo que la ocasión se lo merece. Ya veremos.