
Inolvidable canción que aparece en la película "Casablanca". Se podría traducir como: con el paso del tiempo o mientras el tiempo pasa. En fin que cada vez que se acaba un año nos viene a la mente ese transcurrir del tiempo. Esos 365 días que dejamos atrás y que con sus altos y bajos conforman ya el paisaje de nuestra vida. Nada se puede hacer para cambiar lo realizado, para recuperar el tiempo perdido y eso a veces nos mata. ¿Quién no desearía poder desandar lo andado, rectificar el error, borrar las palabras hirientes, etc? Pero no se puede. Simple y llanamente no se puede. Por eso, me gustaría pedir perdón a los que hice daño, dar las gracias a los que me acompañaron, apoyaron, quisieron y desearos a todos un feliz y bendito año nuevo. Espero poder seguir compartiendo con todos este nuevo año que nos va a nacer. ¡Y éste tiene 366 días!
El 2015 no ha sido un mal año. Si tengo que destacar algún momento me quedo con el día 12 de junio. Ese fue el día que saludé al Papa Francisco en el Retiro Mundial de Sacerdotes. Fue un momento inolvidable que compartí con mis queridos hermanos intérpretes. Para todos nosotros fue un regalo y un reconocimiento a nuestra labor tan escondida y a veces tan poco considerada.
Hasta aquí lo que escribí ayer 30 de diciembre por la mañana. Hoy mi realidad es muy distinta. A mi madre la han tenido que ingresar por una infección respiratoria y todo se ve de otra manera. Os pido oración para que todo pase lo antes posible y sólo se quede en un susto. Besitos y bendición para todos.