sábado, 6 de febrero de 2010

Tiempo de silencio

Llevo tanto tiempo sin escribir que casi no me acuerdo ni de hacerlo. Cada día se me ocurría un tema nuevo, pensaba en plasmar pensamientos, cosas que oía, etc.. y cada día lo dejaba para el siguiente. De todos modos, después de tantas cosas que han sucedido a mi alrededor, se me ha producido un tiempo de silencio interior y exterior. No es malo guardar silencio, sobre todo cuando no tienes mucho que decir o aportar. Es en el silencio donde podemos escuchar mejor otras voces y, sobre todo, la voz del Señor. Aunque a veces también el silencio se vuelve en contra de uno, y con nuestro silencio nos podemos volver cómplices de situaciones y dar lugar a malentendidos. Mi silencio ha sido en parte vaguería pura y dura, y en parte efecto de una situación muy desagradable que estoy viviendo a nivel espiritual. No tengo paz ahora mismo, no me siento a gusto, mi humanidad se rebela y me cuesta ver a personas a las que antes trataba como hermanos. Yo sé perfectamente que esto no debe de ser así y que no me debo dejar llevar por estos sentimientos, pero se me hace bastante cuesta arriba y le pido, le grito, al Señor que me saque de este cenagal en el que me veo metida. También me doy cuenta de que no debemos hacer un ídolo de nadie ni de nada, y que a veces nos hemos sentido tan a gusto con personas o con cosas que las hemos puesto como ideal de nuestras vidas. El único que se merece toda nuestra adoración es el Señor y fuera de Él, no hay nada que no vaya a fallar y decepcionarnos de algún modo u otro. Lo más duro es cuando se trata de algo que habías vivido, compartido y amado y que ahora se te vuelve arena en la boca. Que todo pasa, eso seguro, pero ¿en cuánto tiempo? Como Tú mismo dijiste, Señor: "Aparta de mí este cáliz...pero que se cumpla Tu voluntad".

5 comentarios:

Francisco José Campos Devesa dijo...

Gracias por el pp que me has enviado. Es muy bueno. Te deseo buena suerte. Eres una persona escogida por Dios y los demás te necesitan. Que Dios te bendiga.

amalia dijo...

Lou, no tenía ni idea que escribieras tan bien. Me ha parecido leer un pequeño diario en el que con valentía y corazón cuentas lo que te pasa. Creo que escribir ayuda a uno mismo y a los demás. Resulta precioso.
Todos pasamos situaciones difíciles que no llegamos a entender ...pero lo importante es que lo que vives hoy, dejado en manos de Dios, servirá para crecer. Dios espera mucho de tí, te quiere y te necesita.
Con todo mi cariño. Amalia

Lou dijo...

Gracias por vuestros mensajes de cariño. Es bueno saber que estáis ahí. Besitos

Vicky dijo...

Guaaaaaaaaapaaaaaaa!!!! Que Barcelona y o te echamos de menos. ¡Vuelve pronto!

Mari Angeles dijo...

Lourdes, ayer te echamos de menos en casa de Sagra. Espero y rezo para que aprendamos sin tanto dolor, las personas nos duelen, las situaciones nos desgarran el corazón,porque somos pobres,no damos más de sí ninguno. Que Él y todos los que te queremos podamos echar una manita,perdoname si alguna vez no cumplo tus expectativas. Un abrazo muy fuerte.