sábado, 1 de octubre de 2016

OTOÑO



No escribir nada aquí desde hace casi 6 meses ha sido un descuido imperdonable por mi parte. A veces pensaba hacerlo, pero se quedaba simplemente en eso, un pensamiento. De todos modos, han pasado tantas cosas desde la última vez que sería imposible que yo, tan analítica, sea capaz de sintetizarlas en esta entrada. Una de las cosas a destacar es que ya tengo un año más. ¡Gloria a Dios!
Entonces comenzábamos la Pascua, ahora ya estamos en otoño. Hemos superado una primavera y un verano. Este último muy caluroso, por cierto. Sería falso decir que han sido meses estupendos, llenos de cosas buenas, aunque también lo han sido. He disfrutado de muchos momentos buenos, pero también he sufrido momentos malos. Supongo que como todo el mundo.
Misión MAS ha seguido "tirando palante" y ahora ya somos una fundación pía autónoma reconocida por la Archidiócesis de Madrid: Fundación Misión, Amar y Servir. Pero no dejaremos de llamarnos Misión MAS. Ahora toca buscar padrinos y colaboradores para poder seguir haciendo muchas más cosas. Si queréis ayudar a Misión MAS podéís entrar en el blog y ver cómo hacerlo (de verdad que lo necesitamos). En estos meses hemos tenido un Retiro de Intercesión muy bueno con Denise Bergeron, y unas Vacaciones con Jesús con el Padre Adrián Santarelli. Las Vacaciones fueron en Santiago de la Ribera (mi paraíso) y la verdad que lo hemos pasado genial. De allí ha nacido una amistad muy especial entre los participantes. Con esto de las redes sociales, hemos creado un grupo de "wasap" y estamos en contacto permanente. Somos una auténtica tribu de Jesús. No sé definirlo, pero es algo muy especial. Ahora ya estamos preparando nuevos Retiros y queremos hacer muchas cosas más, De la mano de Jesús y de María, esperamos conseguirlo todo.
Por supuesto que sigo muy implicada en la Renovación Carismática y tuve que volver a Roma para traducir en una reunión preparatoria del Jubileo de Oro. Sigo participando en el grupo de Santa María del Buen Humor y sigo siendo parte de la Coordinadora Regional de la Zona Centro. Poco a poco vamos caminando, avanzando hacia este momento especial que va a ser el Jubileo de Oro, ¡50 años de RCC en el mundo! En noviembre volveré para traducir en el Encuentro de la Fraternidad Católica.
Mi hija ha ido avanzando en su trabajo y ahora, por fin, está de ayudante de realización en un programa de televisión. Sin duda, se lo merece. Es un momento difícil para estos jóvenes tan preparados. No la veo todo lo que quisiera, pero estamos en contacto.
Y mis padres. Ese tema si que es difícil y duro. Están envejeciendo a ojos vistas. Ya tienen 88 años, pero en pocos meses han perdido muchísimo. El otro día me daba cuenta de lo duro que es envejecer. Yo, ahora estoy en el otoño de mi vida, ellos están en el invierno, pero no tienen la posibilidad de pasar a la primavera. Y eso es lo que se nos hace difícil, saber que no va a haber primavera, que va a ser siempre invierno. Estos días están especialmente tiernos y frágiles. Son cada vez más conscientes de que están en la recta final, y en algunos momentos han expresado que ya quieren morirse. Hay momentos en que es difícil no llorar. Le pido al Señor que puedan ver su gloria, como Simeón y Ana, antes de morirse. Que sientan su compañía y su inmensa misericordia en sus vidas. En fin, sólo Dios sabe.
Y aquí estoy, a estas horas de la mañana, con la maleta preparada y "rematando" pendientes. Hoy me voy para Medjugorje una semana. Es mi primera vez. Espero disfrutar de unos días de contemplación y silencio con Jesús y María. Lo necesito. Y luego ¿qué será, será? Lo que Dios quiera.


No hay comentarios: